Sobre nosotros

Enviados como misioneros por las Asambleas de Dios del Ecuador, la familia Castillo Noboa, llega a Murcia en el 2002. El propósito del trabajo misionero a través de la evangelización, la predicación y enseñanza del evangelio tuvo gran acogida por los inmigrantes latinoamericanos en España. Primero en casa, luego en un parque, fue tomando forma la Iglesia. El objetivo principal de “hacer discípulos” empezaba a dar resultado. Varias familias se establecieron firmemente. La iglesia poco a poco va creciendo en número y en fe. Luchas, vicisitudes, desafíos nos han permitido fortalecer nuestra esperanza debido a la convicción para lo cual Dios nos había llamado a España. Al inicio reconocimos colaboradores que más tarde serían Pastores, Juan Javier, Vanessa, Segundo y Carmen, José y Blanca, diáconos y colaboradores como Rosa De la Torre, José y Belén, Giss, Fabiola, Alejandro, Tatiana, han sido apoyo en los renglones escritos de la obra. Más tarde se incorpora Abraham quien es reconocido como pastor. Siempre le dimos un fuerte énfasis a la adoración y alabanza con un grupo de siervos fieles como Jennifer, Jefferson, Diana y Víctor. Así como a la Escuela Dominical, siendo apoyados por maestras comprometidas con el desafío de la educación bíblica de los niños. Seguramente no se nombrará a todos quienes han servido y sirven con amor al Señor en talleres, campamentos, encuentros, tiempos de comunión comiendo juntos, salidas al campo, que han sido actividades que nos han dado la oportunidad de afianzar la unidad y fe. Hemos visto nacer niños, convertirse en jóvenes y ahora casi adultos completos siendo aún parte de la Iglesia. Damos la gloria a Dios por el sostenimiento fiel, por la adhesión de muchos y por la proyección a futuro de continuar estableciendo el Reino de Dios en Murcia, España y Europa.